Landing.

Aunque hayamos llegado en bus, los aterrizajes en las ciudades son siempre complicados. La estación de autobuses de Lisboa un poco caótica pero gracias a la pericia de Atenea y James, hemos conseguido desplazarnos a nuestros respectivos alojamientos. Cruzamos el enorme puente de Vasco da Gama» sobre el Atlántico una a gran vista. Calor en Portugal… (to be continued).