Bueno, Atenea y James, ya se quedaron solos en Portugal. Trabajando, a veces, para ellos, duramente (bienvenidos al mundo real). Los deje contentos y en buenas manos. Como decía un antiguo entrenador de fútbol: «chicos bien, moral alta», así que a seguir disfrutando (y trabajando) de Portugal y buen fin de semana en Lisboa.