El sábado llegué a Roma en un avión bien temprano, nada más llegar tuve que buscar un tren que me llevase a la estación de autobuses.
Estuve preguntando a la gente que había en el aeropuerto y encontré a una chica que sabía español y me explicó como llegar.
En la estación de autobuses me encontré con Javi, mi compañero de erasmus, y allí nos subimos a un bus que nos llevaba a Sibari, una ciudad cerca del pueblo. Tras 7 horas de viaje en bus, llegamos a Sibari y vino Antonio a recogernos. Nos llevó a la casa donde íbamos a alojarnos y conocimos a nuestros compañeros de piso.