Lo bueno se acaba y sin duda la mejor experiencia de mi vida no iba a ser menos, ha sido muy bonito y he tenido la suerte de poder conocerte gente increíble y de muchísimas partes distintas, la mezcla de cultura y de costumbres ha sido muy enriquecedor, al principio si que es verdad que me costaba más relacionarme, pero según iban pasando las semanas más me acostumbraba y más me gustaba.
Yo sinceramente creo que mi mejor opción fue elegir una residencia de estudiantes ya que allí tienes la oportunidad de poder conocer a más gente que está en tu situación y al final se vuelven parte de tu familia.
La despedida a sido lo más duro de todo, pero he tenido la suerte de ser de las primeras en irse, sin duda me llevo personas en el corazón y una segunda familia, gracias a todos por acogerme tan bien y hacerme sentir una más, sobre todo a Inés y Dalia, muy prontito nos veremos porque el Erasmus termina pero nuestra amistad no.
