Día 74. Vuelo de vuelta
Hoy dejamos Múnich y, aunque tenía muchas ganas de volver a casa, también lo hice con cierta pena. Han sido unos meses llenos de experiencias únicas, aprendizajes, nuevos amigos, nuevos lugares y momentos que voy a recordar siempre.
Si alguna vez tenéis la oportunidad de iros de Erasmus, no lo dudéis. No solo se aprende muchísimo a nivel profesional, es también una experiencia personal increíble. Yo me llevo la sensación de haber aprovechado cada día y de volver siendo una versión más rica y completa de mí mismo.
Os dejo unas fotos desde el avión. Tuve suerte y me tocó ventanilla. Esta vez sí, pude ver los Alpes al atardecer… Una despedida preciosa.


